Casa Luisina

2018

Vivienda Unifamiliar. 

Locación: La Plata, Buenos Aires, Argentina

Superficie: 94,60 m2

La casa

Esta vivienda destinada a una joven fotógrafa se ubica en Parque Sicardi, un área comprendida dentro de la delegación de Arana, en el partido de La Plata, al sudeste del centro de la ciudad, entre el Aeródromo Provincial y la localidad vecina de Ignacio Correas.

La estrategia de diseño responde al requerimiento de una superficie de ocupación mínima en primera etapa, que se ajusta a cuatro posibilidades de ampliación distintas y combinables para garantizar la necesidad adaptabilidad a los cambiantes estilos de vida contemporáneos, procurando la posibilidad de que los mismos sean efectuados por la ocupante, con total independencia, una vez habitada la vivienda. Esta es una casa que incluye un futuro estudio fotográfico, de modo que la incorporación progresiva de espacios, debe incluir usos públicos como talleres y exposiciones. En una etapa inicial, se plantea un espacio domestico mínimo, dejando latente la intervención sobre algunos sectores de la vivienda, tanto desde el punto de vista técnico como espacial.  

Las casas están ubicadas en las afueras del casco urbano. La estrategia de ocupación del suelo se centra en la disposición de superficies reducidas a través de un sistema modular compacto. Se apela a sistema de galerías o patios como espacios transición con el objetivo de producir todas clase de variantes de espacios intermedios posibles entre lo que consideramos espacios netamente interiores y aquellos que son exteriores. Se busca a un lenguaje elemental. La disposición funcional se centra en amplificar espacios de mínima superficie logrando cualificarlos con múltiple texturas y posibilidades de uso.

La estrategia de proyecto consiste en generar una grilla simple de hormigón armado que organiza los espacios solicitados por el programa de la casa. La misma se desarrolla íntegramente en Planta Baja permitiendo un futuro crecimiento sobre la Terraza.

El proyecto desarrolla una planta mínima, flexible y diáfana con una clara geometría como base indentitaria de la casa. Los espacios que se expanden hacia el exterior suponen secuencias de apropiación del paisaje circundante, a partir de sistemas de relación flexibles propuestos por los módulos libres.

La lógica compositiva de la estructura propone una dinámica espacial donde los servicios se concentran para liberar los otros espacios de uso. La secuencia geométrica de la modulación funciona como conector y articulador del interior con el exterior. Los materiales exponen su textura y color particulares.

Los espacios que se expanden hacia el exterior suponen secuencias de apropiación del paisaje circundante, a partir de sistemas de relación flexibles propuestos por los módulos libres.

La obra pone en valor arquitecturas locales, a partir de procesos de resignificación de elementos tradicionales.

El objetivo es definir sistemas estructurales y constructivos que se conviertan en oportunidades, espacios de crecimiento y posibles transformaciones. Se piensan de forma libre, abierta para permitir futuras concreciones. Las instalaciones deben admitir cambios y actualizaciones. La habitante es fundamental en el proceso de proyecto, ya que su intervención futura – en la concreción de su hábitat – es uno de los temas fundamentales para decidir los sistemas constructivos, la casa debe adecuarse a sus futuras necesidades, debe ser capaz de ser mejorada.

La vivienda diseñada bajo la condición de adaptabilidad implica concebirla ya no como un producto terminado, sino como un soporte. Una vivienda que en su fase inicial ofrece prestaciones mínimas, pero que ha sido pensada para poder incorporar nuevas terminaciones, mejores equipamientos y futuras aportaciones de nuestra usuaria. De este modo se también se optimizan los recursos económicos y materiales.

Equipo: Luciana Fernandez Reimers, Elena Risso.

Fotografías: Fernando Schapochnik.

DOCUMENTACIÓN